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Todos los especialistas en cuidado de la piel coinciden en una cosa: si tuvieran que señalar un paso dentro de esta rutina del que no pudieran prescindir, ese sin duda sería el de la limpieza facial. Los expertos abogan por llevar a cabo la limpieza facial por la mañana y por la noche, incluso aunque no se haya usado maquillaje.
No obstante, el gesto de limpiar la piel del rostro cuenta con numerosas variantes, algunas de las cuales incluyen varios pasos y diferentes productos. Entre ellos, el tónico es quizá el cosmético más controvertido. Mientras para algunas personas resulta esencial, para otras no lo es tanto. ¿Quién tiene razón? Los dermatólogos de la Unidad de Estética Facial del Grupo Pedro Jaén responden a las preguntas y dudas relacionadas con la necesidad de usar tónico facial.
¿El tónico es imprescindible?
No. No es estrictamente necesario usar tónico para completar una buena pauta de cuidado facial. Se trata de un producto extra que, según la formulación que contenga (activos hidratantes, astringentes o calmantes), puede venir bien para completar la rutina de cuidados en determinados tipos de piel. No obstante, si usamos productos limpiadores que ya lleven estos activos entonces no sería necesario el tónico.
Usar tónico o no depende en gran medida de las preferencias de cada persona. Algunas se decantan por llevar a cabo más pasos en este proceso y otras en cambio demandan rutinas más sencillas, bien por falta de tiempo o bien porque quieren asegurarse de que van a ser constantes y disciplinadas a la hora de cumplirla.
En los casos en los que es probable olvidarse o incumplir una rutina compleja, lo mejor es simplificar y recomendar algo que se pueda llevar a cabo habitualmente con el paso del tiempo. En estos casos podemos prescindir del tónico para dar prioridad a otros pasos de la limpieza. ¿puede sustituir al agua micelar?
No. El tónico no es un sustituto de ningún producto de limpieza del rostro, sino un complemento que se puede incluir o no en esta rutina según los gustos y preferencias personales.
En cualquier caso, hay que saber que el tónico debe ir siempre al final de todos los pasos de limpieza, independientemente de que esta rutina incluya varios pasos o de uno solo.
¿El tónico facial equilibra el pH?
No. El tónico no equilibra el pH de la piel. Es cierto que en ocasiones la limpieza con jabones puede alterar el manto ácido de la piel; una especie de capa protectora muy fina que hay en su superficie. No obstante, una piel sana es capaz de restablecer la normalidad del pH en unas pocas horas sin necesidad de usar tónico.
De esta manera, las personas que noten su piel irritada, descamada o, simplemente, tirante después de la limpieza deben consultar con un especialista para modificar los productos con los que lleva a cabo este gesto y adaptarlos a su tipo de piel. También puede ser recomendable que consulte con un dermatólogo acerca de la existencia de un posible problema cutáneo de base que hubiera que tratar, independientemente de la rutina de cuidado diario.
¿El tónico cierra los poros?
No. Para empezar, los poros de la piel no se abren o cierran según los cosméticos que usemos, ya que son estructuras de la dermis que no se pueden modificar con cosmética. Los poros pueden estar más dilatados y acumular más suciedad, en cuyo caso serán más evidentes. Por el contrario, una buena limpieza y el uso de un tónico con principios activos astringentes puede ayudar a disimularlos y a que se vean menos, pero no a cerrarlos como tal.
¿El tónico es apto para todos?
El tónico se puede usar en todo tipo de pieles, siempre que sus ingredientes sean adecuados, ya que actualmente en el mercado hay formulaciones para responder a las necesidades específicas de la piel en la que queramos aplicarlo. Este producto puede aportar algunas ventajas para el cuidado de la piel, siempre que esté bien indicado y se aplique según el consejo del dermatólogo.
Si hemos decidido usar tónico para nuestra rutina de cuidado facial, hemos de fijarnos en la lista de ingredientes y escogerlo según el tipo de piel en el que vayamos a usarlo. En una piel sensible debemos evitar tónicos con alcohol o alfahidroxiácidos (AHA) en alta concentración, ya que pueden resultar irritantes y provocar rojeces, tirantez o descamación. Sin embargo, estos ingredientes pueden ir bien en una piel grasa o con tendencia acneica.
También debemos evaluar el objetivo que queramos conseguir con el tónico. Así, alguien que busque hidratación porque se nota la piel tirante después de usar un jabón limpiador deberá usar tónicos con ácido hialurónico para compensar; aunque también podría solucionar esta cuestión cambiando a un jabón limpiador más adecuado para tu tipo de piel o a una leche limpiadora.
Por otra parte, el caso de pieles reactivas, con rosácea… deben evitar tónicos con alcohol. De esta forma, si desean incluir el tónico en sus pasos de limpieza facial, deben optar por formulaciones con agentes calmantes o niacinamida.
Finalmente, las personas con la piel grasa o con acné deben usar tónicos con AHA o incluso agentes exfoliantes según el estado de su piel, ya que favorecen la eliminación de la grasa y suciedad que obstruye los poros y hacen una limpieza más exhaustiva, lo que contribuye a afinar la textura de la piel y lucir una superficie más uniforme.
La limpieza facial sí es esencial
La limpieza facial por la mañana es fundamental para eliminar el sebo que se segrega durante la noche, los restos de cosméticos que hayamos podido aplicar antes de acostarnos y para que la piel esté mejor preparada para recibir los productos de cuidado y tratamiento de día.
Por su parte, una buena limpieza facial nocturna es imprescindible para retirar el maquillaje. Si no te has maquillado, igualmente debes limpiar la piel para eliminar partículas de contaminación, sudor, sebo, cremas… que se hayan acumulado durante la jornada en la superficie de la piel.
En definitiva, lo verdaderamente esencial es llevar a cabo una buena limpieza de la piel, ya que es la piedra angular para que está sana y bonita. Este gesto ha de hacerse con productos adecuados que cumplan con su cometido sin alterar la barrera cutánea ni provocar reacciones adversas. Por este motivo, lo más recomendable es contar con la orientación de un profesional.
No obstante, el gesto de limpiar la piel del rostro cuenta con numerosas variantes, algunas de las cuales incluyen varios pasos y diferentes productos. Entre ellos, el tónico es quizá el cosmético más controvertido. Mientras para algunas personas resulta esencial, para otras no lo es tanto. ¿Quién tiene razón? Los dermatólogos de la Unidad de Estética Facial del Grupo Pedro Jaén responden a las preguntas y dudas relacionadas con la necesidad de usar tónico facial.
¿El tónico es imprescindible?
No. No es estrictamente necesario usar tónico para completar una buena pauta de cuidado facial. Se trata de un producto extra que, según la formulación que contenga (activos hidratantes, astringentes o calmantes), puede venir bien para completar la rutina de cuidados en determinados tipos de piel. No obstante, si usamos productos limpiadores que ya lleven estos activos entonces no sería necesario el tónico.
Usar tónico o no depende en gran medida de las preferencias de cada persona. Algunas se decantan por llevar a cabo más pasos en este proceso y otras en cambio demandan rutinas más sencillas, bien por falta de tiempo o bien porque quieren asegurarse de que van a ser constantes y disciplinadas a la hora de cumplirla.
En los casos en los que es probable olvidarse o incumplir una rutina compleja, lo mejor es simplificar y recomendar algo que se pueda llevar a cabo habitualmente con el paso del tiempo. En estos casos podemos prescindir del tónico para dar prioridad a otros pasos de la limpieza. ¿puede sustituir al agua micelar?
No. El tónico no es un sustituto de ningún producto de limpieza del rostro, sino un complemento que se puede incluir o no en esta rutina según los gustos y preferencias personales.
En cualquier caso, hay que saber que el tónico debe ir siempre al final de todos los pasos de limpieza, independientemente de que esta rutina incluya varios pasos o de uno solo.
¿El tónico facial equilibra el pH?
No. El tónico no equilibra el pH de la piel. Es cierto que en ocasiones la limpieza con jabones puede alterar el manto ácido de la piel; una especie de capa protectora muy fina que hay en su superficie. No obstante, una piel sana es capaz de restablecer la normalidad del pH en unas pocas horas sin necesidad de usar tónico.
De esta manera, las personas que noten su piel irritada, descamada o, simplemente, tirante después de la limpieza deben consultar con un especialista para modificar los productos con los que lleva a cabo este gesto y adaptarlos a su tipo de piel. También puede ser recomendable que consulte con un dermatólogo acerca de la existencia de un posible problema cutáneo de base que hubiera que tratar, independientemente de la rutina de cuidado diario.
¿El tónico cierra los poros?
No. Para empezar, los poros de la piel no se abren o cierran según los cosméticos que usemos, ya que son estructuras de la dermis que no se pueden modificar con cosmética. Los poros pueden estar más dilatados y acumular más suciedad, en cuyo caso serán más evidentes. Por el contrario, una buena limpieza y el uso de un tónico con principios activos astringentes puede ayudar a disimularlos y a que se vean menos, pero no a cerrarlos como tal.
¿El tónico es apto para todos?
El tónico se puede usar en todo tipo de pieles, siempre que sus ingredientes sean adecuados, ya que actualmente en el mercado hay formulaciones para responder a las necesidades específicas de la piel en la que queramos aplicarlo. Este producto puede aportar algunas ventajas para el cuidado de la piel, siempre que esté bien indicado y se aplique según el consejo del dermatólogo.
Si hemos decidido usar tónico para nuestra rutina de cuidado facial, hemos de fijarnos en la lista de ingredientes y escogerlo según el tipo de piel en el que vayamos a usarlo. En una piel sensible debemos evitar tónicos con alcohol o alfahidroxiácidos (AHA) en alta concentración, ya que pueden resultar irritantes y provocar rojeces, tirantez o descamación. Sin embargo, estos ingredientes pueden ir bien en una piel grasa o con tendencia acneica.
También debemos evaluar el objetivo que queramos conseguir con el tónico. Así, alguien que busque hidratación porque se nota la piel tirante después de usar un jabón limpiador deberá usar tónicos con ácido hialurónico para compensar; aunque también podría solucionar esta cuestión cambiando a un jabón limpiador más adecuado para tu tipo de piel o a una leche limpiadora.
Por otra parte, el caso de pieles reactivas, con rosácea… deben evitar tónicos con alcohol. De esta forma, si desean incluir el tónico en sus pasos de limpieza facial, deben optar por formulaciones con agentes calmantes o niacinamida.
Finalmente, las personas con la piel grasa o con acné deben usar tónicos con AHA o incluso agentes exfoliantes según el estado de su piel, ya que favorecen la eliminación de la grasa y suciedad que obstruye los poros y hacen una limpieza más exhaustiva, lo que contribuye a afinar la textura de la piel y lucir una superficie más uniforme.
La limpieza facial sí es esencial
La limpieza facial por la mañana es fundamental para eliminar el sebo que se segrega durante la noche, los restos de cosméticos que hayamos podido aplicar antes de acostarnos y para que la piel esté mejor preparada para recibir los productos de cuidado y tratamiento de día.
Por su parte, una buena limpieza facial nocturna es imprescindible para retirar el maquillaje. Si no te has maquillado, igualmente debes limpiar la piel para eliminar partículas de contaminación, sudor, sebo, cremas… que se hayan acumulado durante la jornada en la superficie de la piel.
En definitiva, lo verdaderamente esencial es llevar a cabo una buena limpieza de la piel, ya que es la piedra angular para que está sana y bonita. Este gesto ha de hacerse con productos adecuados que cumplan con su cometido sin alterar la barrera cutánea ni provocar reacciones adversas. Por este motivo, lo más recomendable es contar con la orientación de un profesional.
