Todo el bombo que se le da al aceite de coco es bien merecido. Es rico en sustancias antivirales, así como antifúngicas y antibacterianas. Los beneficios del aceite de coco para la piel incluyen:
- Defiende la piel contra los microorganismos nocivos. Los ácidos grasos que contiene el coco, principalmente el ácido láurico y el ácido cáprico, son excelentes para mantener la piel sana gracias a sus propiedades antimicrobianas que eliminan los microorganismos dañinos que pueden crecer en la piel.
- Las alteraciones cutáneas como el acné, la foliculitis y la celulitis son causadas por hongos y bacterias que los ácidos láurico y cáprico presentes en el aceite de coco ayudan a contrarrestar.
- El aceite de coco es muy hidratante e ideal para pieles secas.
- El aceite de coco en el rostro ha demostrado un gran poder de hidratación, sobre todo en el caso de cutis secos y agrietados. El aceite de coco ayuda a hidratar la piel y a restaurar su barrera natural para retener la humedad. Por lo tanto, el aceite de coco para la piel seca es fantástico.
- Las propiedades antiinflamatorias del aceite de coco hacen que pueda combatir el acné. Además, se ha demostrado que los ácidos láurico y cáprico del aceite de coco neutralizan las bacterias que causan el acné.
- El aceite de coco puede favorecer la sanación de la piel. Los estudios han demostrado que el aceite de coco tiene la capacidad de aumentar la cantidad de antioxidantes y colágeno en nuestro cuerpo, los cuales juegan un papel importante en la regeneración y reparación natural de la piel.
- El aceite de coco puede ayudar a reducir la inflamación gracias a sus antioxidantes. Estos últimos ayudan a combatir los radicales libres (átomos inestables que se adhieren a la piel) que pueden ser inflamatorios.
- El aceite de coco contribuye a un tono de piel más uniforme. Está demostrado que en el rostro y la piel contrarresta las manchas, reduce las rojeces y mejora el tono desigual de la piel.
- El aceite de coco puede combatir los signos del envejecimiento. Uno de los beneficios para la piel es que promueve la producción natural de colágeno, lo que aumenta la elasticidad de la piel para que sea más firme. La mejora de la elasticidad implica la reducción del riesgo de aparición de líneas y arrugas.
- El aceite de coco suaviza la piel. Varios de los ácidos grasos que contiene, como el ácido cáprico, son increíblemente emolientes y la dejan más aterciopelada.